La construcción del futuro ya no se levanta, se cultiva
17 noviembre 2025
¿Qué significa que la construcción del futuro “se cultiva” y no se levanta?
Durante décadas, construir ha sido sinónimo de extraer, transformar y consumir recursos. Pero el cambio climático y la escasez de materias primas nos obligan a repensarlo todo. En Brillas Agustí creemos que el futuro de la arquitectura y la ingeniería está en cultivar espacios que vivan en armonía con el entorno, no en imponer estructuras sobre él. Cultivar significa diseñar edificios vivos, hechos con materiales que respiran, almacenan energía y se regeneran, como lo hace la naturaleza.¿Cuáles son los materiales que están revolucionando la construcción sostenible?
La innovación ya no pasa solo por la eficiencia energética. Pasa por repensar el ADN de los materiales con los que construimos. Hoy existen soluciones sorprendentes:- Micelio, el tejido de los hongos, que se utiliza para crear paneles y bloques biodegradables, ignífugos y aislantes.
- Superwood, una madera tratada que logra una resistencia superior al acero, pero con una huella de carbono mínima.
- Hormigón batería, una mezcla conductiva capaz de almacenar energía y alimentar sistemas eléctricos en el propio edificio.
- Cáñamo-cal, una combinación natural que regula la humedad, mejora el aislamiento térmico y captura CO₂ durante su vida útil.
- Bioplásticos de biochar, que además de ser carbono-negativos, permiten crear fachadas reciclables e inteligentes.
¿Por qué hablamos de “materiales vivos”?
Porque algunos de estos materiales crecen, se regeneran o se adaptan a su entorno, igual que un organismo natural. Por ejemplo, existen cementos biológicos con bacterias que reparan grietas de forma autónoma, o fachadas bioactivas que purifican el aire exterior. En Brillas Agustí lo entendemos como una nueva etapa de la arquitectura: de edificios estáticos a ecosistemas constructivos.¿Qué papel juega la economía circular en esta nueva forma de construir?
Un papel esencial. Ya no se trata solo de construir con materiales sostenibles, sino de hacerlo pensando en todo el ciclo de vida: desde la extracción hasta la reutilización. Por eso, los proyectos más innovadores incorporan pasaportes de materiales, que permiten rastrear el origen, composición y destino de cada componente. De esta forma, un edificio se convierte en un banco de materiales reutilizables para el futuro. En Brillas Agustí apostamos por el diseño circular: cada decisión técnica tiene una repercusión ambiental, y la sostenibilidad se integra desde la fase de diseño.¿Qué beneficios aporta “cultivar” edificios en lugar de construirlos como antes?
- Reducción de emisiones de CO₂ gracias al uso de biomateriales y procesos circulares.
- Mayor bienestar interior, con materiales naturales que regulan temperatura, humedad y calidad del aire.
- Eficiencia energética real, con materiales que generan o almacenan energía.
- Durabilidad y resiliencia, porque los nuevos materiales se adaptan y reparan.
- Valor añadido, tanto económico como de marca, al apostar por innovación y sostenibilidad.
¿Cómo está contribuyendo Brillas Agustí a este cambio?
En Brillas Agustí acompañamos a nuestros clientes hacia una nueva forma de construir, basada en la innovación, la eficiencia y el respeto por el entorno.- Aplicamos criterios de construcción sostenible y circular en todas las fases del proyecto.
- Exploramos materiales emergentes que reducen la huella ambiental sin comprometer la seguridad ni la estética.
- Y trabajamos junto a promotores, arquitectos y técnicos para cultivar espacios que mejoran la vida de las personas.